BUENOS AIRES,
Esta madrugada, la Cámara de Diputados convirtió en ley la adhesión de Argentina al Protocolo Facultativo de la Convención sobre Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), una polémica norma que abriría las puertas a la legalización del aborto en el país.
La votación fue de 116 votos favorables, 30 negativos y 3 abstenciones.
Aunque la mayoría de los diputados prefirió no hablar, el congresista de Fuerza Republicana, Roberto Lix Klett, criticó abiertamente el proyecto, denunció la falta de tiempo para hacer observaciones al mismo y afirmó que "el protocolo introduce solapadamente el aborto en la legislación argentina".
El parlamentario aseguró que la norma "es un cachetazo a la sociedad" que pone en "juego la vida humana". La normativa, enviada al Congreso por el Poder Ejecutivo, ya había sido aprobada en el Senado.
Tanto los obispos como entidades civiles pidieron a los congresistas no aprobar el mecanismo.
Ayer, la Universidad Católica Argentina advirtió al acceder a las recomendaciones de la CEDAW se hará de la Argentina un país dependiente de órdenes internacionales contrarias a una visión integral de la mujer y del valor de la vida humana.