LIMA,
Bajo el lema “No tengan miedo de Cristo. Él no quita nada, lo da todo”, más de cinco mil jóvenes participaron el último fin de semana en la localidad norteña de Piura del Primer Encuentro Juvenil, presidido por el Arzobispo de la ciudad, Mons. José Antonio Eguren Anselmi.
En el evento realizado en el coliseo del Colegio Don Bosco, los jóvenes dieron un sí sin miedos al llamado del Señor Jesús en sus vidas, demostrando que la Iglesia está llena de vida y es portadora de la verdadera esperanza para el mundo.
En el acto central del encuentro, Mons. Eguren renovó su compromiso de que los jóvenes siempre tendrán un lugar especial en su labor pastoral y pidió que las palabras del Papa Benedicto XVI –que enmarcaron el encuentro– los haga entender que “solo al dejar entrar a Cristo no se pierde nada, sino más bien la vida se hace más libre, bella y grande”.
“Solo con esta amistad se abren las puertas de la vida, se abren realmente las grandes potencialidades de la condición humana. Solo con esa amistad experimentamos lo que es bello y lo que nos libera. Queridos jóvenes, no tengan miedo de Cristo. Él no quita nada y lo da todo. Quien se da a Él, recibe el ciento por uno. Abran de par en par las puertas a Cristo y encontrarán la verdadera vida”, anotó.
Durante el encuentro, cinco jóvenes vestidos con trajes típicos de la región le obsequiaron una alforja (un bolso tejido de lana), un sombrero de paja, una artesanía y la punta de un pez espada. Posteriormente una Cruz de más de tres metros de alto fue confiada a los jóvenes de la Vicaría Foránea de Sullana (al norte de Piura), sede del próximo Encuentro Juvenil 2007.
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