MADRID,
La clínica abortista El Bosque de Madrid se sumó esta semana a la lista de centros sanitarios que realizan abortos tardíos ilegales en España. Una mujer asturiana reveló a la Asociación de Víctimas del Aborto (AVA) que hace 12 años fue ahí sometida a un aborto cuando tenía más de seis meses de gestación.
La mujer identificada como Lucía L. resultó embarazada a los 17 años de edad. “Por miedo a la reacción de mis padres no dije nada hasta que fue muy evidente. Mis padres y mi novio en un primer momento pensaron que era mejor que abortase y fuimos a una clínica en Asturias, me miraron y me dijeron que tenía un embarazo de 26 semanas, pero que no me preocupase, que todavía podía abortar, que había una clínica en Madrid, la Clínica el Bosque, que estaba especializada en hacer abortos cuando el embarazo está ya muy avanzado. La clínica de Asturias lo gestionó todo y al día siguiente tenía que estar en Madrid, para estar a las 8 de la mañana en ayunas en el centro y con 350 mil pesetas en efectivo”, recuerda.
La sometieron a una ecografía que ella no vio. Le dijeron que “no había problema con el aborto, que iba a ser como ‘sacarse una muela’, que de un aborto temprano a uno tardío solo cambiaba la técnica y el precio, nada más”.
“No nos explicaron nada más sobre el desarrollo fetal, el procedimiento, la duración de la operación, riesgos físicos y psicológicos, sólo que era con anestesia general y que era muy sencillo”, recordó.
Fue entrevistada por “una psicóloga que me dio unos test ya completados que yo tenía simplemente que firmar, me dijo que con eso justificaban el aborto. No cruzó ni una palabra más conmigo. Firmé y salimos de allí”.
Lucía fue anestesiada y no sabe lo que ocurrió. “Desperté en la habitación y tenía un gasa en la vagina, tenía suero y una sonda para la orina. Yo pensé que había pasado todo, pero de repente me toqué el vientre de forma instintiva y me di cuenta que mi hijo seguía conmigo. Le pregunté a mi madre que estaba allí que por qué no había terminado todo y me decía que estuviese tranquila, pero vi el pánico en su cara”.