MADRID,
En el marco de una Misa presidida por el Prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, Cardenal José Saraiva Martins, fue beatificada esta tarde en la catedral de Bilbao la fundadora del Instituto de las Mercedarias Misioneras de Bérriz, la misionera bilbaína Margarita María López de Maturana.
El Cardenal Saraiva destacó en su homilía que la nueva beata era "una mujer que se dejó conducir por los caminos de Dios" y tomando frases pronunciadas el día que murió, dijo que "la nueva beata tenía el corazón en el cielo, la mirada en el tiempo y los pies en la tierra".
Según el Purpurado, el mensaje de la nueva beata es una llamada misionera: "Id, y escuchar las alegrías y esperanzas, las tristezas y las angustias de las gentes de nuestro tiempo; id y anunciad el Evangelio de Jesucristo, id y luchad por la dignidad y por la libertad de todo el ser humano imagen y semejanza de Dios, id y ser instrumentos de paz y reconciliación, id y renovad la Iglesia y renovad el mundo".
En la ceremonia estuvieron presentes, además del delegado papal para esta ocasión, el Nuncio Apostólico en España, Mons. Manuel Monteiro de Castro, los obispos vascos, entre ellos el Obispo de Bilbao y Presidente de la Conferencia Episcopal Española, Mons. Ricardo Blázquez, y una representación de la congregación, además de varias autoridades y representantes civiles y políticos vascos.
En la ceremonia, que coincide con la celebración de la Jornada Mundial de las Misiones (DOMUND), se hicieron asimismo presentes unos dos mil peregrinos llegados de China, Filipinas, Congo y Zambia.
Durante el acto litúrgico, seguido por muchos a través de una pantalla de televisión colocada en el exterior de la catedral debido a la gran cantidad de asistentes que desbordaron el templo, se leyó la carta apostólica por la que el Papa Benedicto XVI declara beata a la misionera bilbaína y establece el 24 de julio como fecha de celebración de su fiesta.