LA HABANA,
Opositores al régimen de Fidel Castro y defensores de los derechos humanos destacaron la vida de Gustavo Arcos Bergnes, fundador del Comité Cubano Pro Derechos Humanos (CCPDH), fallecido recientemente.
Arcos Bergnes falleció el martes último en el Hospital Calixto García a los 79 años de edad, víctima de un paro cardiorrespiratorio. El líder disidente padecía de Alzheimer, neumonía y trastornos renales.
En declaraciones recogidas por El Nuevo Herald, el ex preso político Ricardo Bofill afirmó que con su partida "perdimos un gran maestro y un inspirador a la hora de organizar y lograr consensos" y calificó al líder disidente como "un maestro de decencia, de cordura política, de frases firmes pero amables y, sobre todo, de perseverancia".
Gustavo Arcos y Ricardo Bofill crearon juntos, en la cárcel del Combinado del Este, el CCPDH, sindicado como ilegal por parte del gobierno, en 1983.
Por su parte el historiador y ensayista Carlos Alberto Montaner señaló que "el CCPDH de Arcos y Bofill es un punto y aparte en la historia política de Cuba" y explicó que "a partir de ahí comienza la lucha por los derechos humanos" en la isla.
De otro lado, el sobrino del fundador del CCPDH, Sebastián Arcos Cazabón, dijo que "Gustavo deja un legado de rectitud moral, de sentido absoluto del deber y de renuncia total a las ambiciones materiales, de poder o gloria", mientras que el opositor Vladimiro Roca, de la coalición Todos Unidos, indicó que Arcos Bergnes "fue una de las figuras emblemáticas del movimiento de derechos humanos" y "un hombre íntegro, que hablaba de frente y sin dobleces".