VARSOVIA,
Unos cuatro mil sacerdotes polacos, es decir la sexta parte del total, labora y sirve en el extranjero, según informó el periódico "Gazeta Wyborcza".
El diario polaco señala que la razón principal por la que la mayoría de estos sacerdotes salió de Polonia fue para atender a las poblaciones polacas que vivían en otros países, sin embargo, significaron también un refuerzo a la labor ministerial de los sacerdotes locales donde la falta de vocaciones era grande.
Al contrario de otros países de Europa occidental, las ordenaciones sacerdotales en Polonia han sido siempre numerosas, indicó la experta en asuntos eclesiales, Ewa Czaczkowska, del diario “Rzeczpospolita”.
Numerosas diócesis polacas han acogido el llamado del Papa Benedicto XVI y han enviado sacerdotes a las comunidades de polacos en el extranjero, fruto de la reciente ola de emigración hacia Gran Bretaña, Alemania, Francia, Irlanda, Suecia y Noruega.
El año pasado fueron 106 los sacerdotes enviados a servir en el extranjero. El diario “Gazeta Wyborcza” informa que este número probablemente aumentará, puesto que también el número de emigrantes ha aumentado hasta cinco veces en los últimos años, así, hoy existen casi 60 mil polacos en Dublín, la capital irlandesa.
También en Escocia, desde su inclusión en la Unión Europea, viven hoy en día muchos ciudadanos polacos. Recientemente el Obispo de Aberdeen, Mons. Peter Moran, visitó la arquidiócesis de Cracovia para pedir”refuerzos”. El número de católicos en su diócesis se ha doblado, y en otras, hasta triplicado. Estos fieles polacos necesitan atención espiritual, señaló Mons. Moran. La arquidiócesis de Cracovia no ha demorado en su generosa respuesta y son ya seis los sacerdotes que han partido hacia tierras escocesas para servir.