LIMA,
Ante el envío masivo de correos electrónicos que advierten de la supuesta llegada del "anticristo" el 6 de junio de 2006 (06/06/06), así como la supuesta revelación de un falso tercer secreto de Fátima que dicen leyó antes de morir Juan Pablo II, el doctor en Teología, Gustavo Sánchez, precisó que "cierta prensa y cierta literatura hoy en día pretenden generar una especie de psicosocial para asustar a la gente y obtener un ambiente favorable para vender".
En entrevista concedida a ACI Prensa, con referencia al falso tercer secreto de Fátima que deambula por Internet y otros temas, el experto teólogo manifestó que el verdadero "ha sido ya revelado y dado a conocer en el año 1998 por el Papa Juan Pablo II y tanto el contenido como el comentario teológico, se puedan encontrar en el diario Vaticano, L’Osservatore Romano".
Al referirse a la fecha 06/06/06, dijo que "muchas personas asocian el 6 de junio de 2006 a un pasaje del Apocalipsis". "Hay que tener claro –precisó– que el libro del Apocalipsis pertenece a un género literario, que es el género apocalíptico, que no quiere indicar con precisión o exactitud histórica ni fecha ni acontecimiento, sino que a través de una serie de imágenes simbólicas y descripciones fantásticas da a entender que Dios esta llevando a la historia a su realización, que está salvando a la humanidad a través de los sucesos que se van dando aquí en nuestro mundo".
"El 666 (de la Biblia ) –añadió– es una cifra simbólica que quiere indicar sencillamente al agente del poder del mal que se enfrenta a Dios; en el caso de Juan, autor del Apocalipsis, se trata seguramente del emperador".
El teólogo manifestó que "el hecho de pensar que a través de una cadena" de correos electrónicos "se puede prevenir a las personas, habla de ignorancia y de falta de preparación, ante esto la solución es educar, explicar; porque lo que hace libre a una persona es la verdad, la libera del miedo, de la angustia, de la superstición". "Yo invitaría a las personas a no hacer caso a las cadenas por no tener ningún valor, no hay ninguna desgracia o daño que le pueda ocurrir a una persona por ignorar eso", aclaró.
"Hay que recordar –enfatizó– lo que dice Jesús en Marcos 13, 32 sobre el momento del fin del mundo: Nadie, ni siquiera el Hijo del Hombre sabe el día ni la hora".