VATICANO,
Una delegación del Vaticano en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) expresó su rechazo al reconocimiento de la Asociación Internacional de Lesbianas y Gays (ILGA) como ONG de esa institución, que solicita su aceptación como tal para asuntos de derechos humanos.
Según informa Terry Vanderheyden del sitio pro-vida LifeSiteNews.com, la delegación vaticana, liderada por Mons. Rubén Dimaculangan, estableció el 16 de mayo que la exigencia de la ILGA no tiene nada que ver con derechos humanos.
"La orientación sexual no es comparable a la raza u origen étnico. Pese a sus aseveraciones sobre derechos humanos, los intereses particulares de estas ONGs están fuera del campo de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y otros instrumentos jurídicos internacionales", indicó Mons. Dimaculangan
"En otras palabras, lo que la ILGA y quienes la proponen buscan en realidad no es igualdad de derechos sino derechos especiales que les permitan tener una amplia libertad de acción para una discreta supresión de las distinciones morales en las opciones y conductas que son de vital importancia para la comunidad y el orden internacionales", explicó el representante vaticano.
Asimismo, destacó ante la ONU que "colocar el estilo de vida homosexual al nivel de matrimonio tendrá un impacto directo en el entendimiento de la sociedad sobre la naturaleza y los derechos de la familia que los pone en peligro".
El diplomático vaticano explicó que el significado de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, pese a las "interpretaciones contrarias", está basada en un entendimiento del matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer.