BUENOS AIRES,
El Arzobispo de Corrientes, Mons. Domingo Castagna, exhortó a los fieles a vivir la fe coherentemente, y recordó que profesar la fe incluye “necesariamente exponerla sin ambages” sin agredir a quienes no la comparten.
Mons Castagna señaló también que “los intentos de un diálogo artificial, donde las legítimas identidades aparecen indefinibles o debilitadas, se constituyen en el caldo de cultivo del moderno relativismo”.
El Arzobispo consideró el difícil equilibrio que hay que cuidar entre “la firmeza en la profesión de la fe y el diálogo honesto y fraterno con el mundo de la cultura y de la búsqueda. Habrá que asegurar, en los cristianos, el fuerte vínculo con Jesucristo: la Vid verdadera. Entonces no se producirán confusiones en la identificación de los valores cristianos y su conveniente manifestación pública y privada”.
Tras indicar que “algunos pensarán que trato desconsideradamente a los miembros de mi Iglesia”, aclaró que procuraba reflexionar en voz alta “en el empeño de una mayor coherencia entre mi compromiso temporal y la fe que profeso. No puedo ser cristiano ‘a medias’, como quien se inscribe en una institución que desconoce, o cuya titularidad es exhibida como un valor heredado y menospreciado”. “Es el momento de hacerse cargo de la misión anexa a la identidad declarada. Si soy cristiano debo comportarme como tal y aceptar –de verdad– sus exigencias”, destacó.
Mons. Castagna consideró que “de esta manera logramos el ideal buscado con ansiedad entre las ofertas contradictorias de la sociedad que integramos”, porque “ser cristianos es una misión desafiante y exigente; me refiero a serlo sin esperar que nos reporte satisfacciones superficiales y escurridizas”.
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