BUENOS AIRES,
Durante la Misa Crismal celebrada en la Catedral, Mons. Carlos María Franzini, Obispo de Rafaela, exhortó a los sacerdotes en particular y a la comunidad diocesana en general a una conversión “no sólo personal y moral sino también comunitaria y pastoral”.
“La conversión pastoral nos llama a todos a adecuar cada día más nuestra vida a los designios de Dios”, señaló el Prelado al recordar que “el camino que recorremos como Iglesia es animado por el Espíritu que nos convoca a ser más dóciles a la voluntad del Padre”.
Mons. Franzini indicó que la conversión no es tal hasta que no alcanza la dimensión pastoral de nuestra vida cristiana y pidió a los sacerdotes, ser los primeros y más disponibles para acoger la llamada a la conversión pastoral, propuesta a todo el Pueblo de Dios, y les pidió “revisar su adhesión cordial y decidida a la marcha pastoral que vienen haciendo a fin de realizar un trabajo conjunto y en comunión orgánica con la Iglesia diocesana, en favor de objetivos comunes”.
“El objetivo general es –indicó– “consolidar el encuentro de los bautizados con Jesús, mediante una intensa vida sacramental, para que seamos testigos y servidores suyos”.
Por último, Mons. Franzini insistió en que esa meta “nunca podrá plasmarse si no suscita en nosotros, ante todo en nosotros, pastores, la ardiente pasión por este encuentro”.
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