En respuesta al creciente movimiento que favorece las uniones homosexuales y que busca equiparar éstas al matrimonio, la Conferencia de Obispos Católicos de Arizona emitió un mensaje pastoral titulado “¿Por qué el matrimonio es importante para la Iglesia Católica?” en el que recuerdan que éste es la unión de un hombre y una mujer.
Los tres obispos del estado de Arizona, Mons. Donald Pelotte, de Gallup; Mons. Gerald Kicanas, de Tucson; y Mons. Thomas Olmsted, de Phoenix; expresaron en el mensaje del 1ero de marzo su profunda preocupación “por los creyentes católicos y por el bienestar de la sociedad aquí en Arizona con respecto al significado del matrimonio”.
Para los prelados, el matrimonio es “una unión fiel, exclusiva y para toda la vida entre un hombre y una mujer que están juntos en una íntima comunidad de vida y amor, por designio de Dios”. “Las uniones de personas del mismo sexo”, por otro lado, “carecen de la complementariedad natural y de la capacidad para generar vida naturalmente”, precisaron.
La declaración también reconoce que el matrimonio es la base de la familia y que ésta es la base de la sociedad. Por ello, el matrimonio es “una relación personal con un enorme significado público”.
Asimismo, los obispos manifestaron su compromiso para “preservar el único e irremplazable status que el matrimonio siempre ha tenido en nuestra sociedad” y por ello quieren expresar su apoyo a la iniciativa para protegerlo en Arizona.
Los obispos destacaron que la Iglesia se opone al reconocimiento legal de las uniones del mismo sexo “para prevenir la redefinición y devaluación de la institución del matrimonio”. Sin embargo, reiteraron, “que la Iglesia enseña que las personas, sin importar su orientación, deben ser tratadas con compasión y sus derechos y libertades civiles deben respetarse”.