BUENOS AIRES,
El Obispo de Posadas, Mons. Juan Rubén Martínez, aclaró que el discípulo de Cristo se diferencia de quien sigue otras “ofertas religiosas” porque reconoce la necesidad de asumir sus enseñanzas liberadoras, en cambio, quien sigue una secta cae en una clara “manipulación de la conciencia”.
“Basta observar algunos programas televisivos de propaganda religiosa para discernir una clara intención de manipulación de la conciencia, sobre todo en los que padecen angustias y sufrimientos”, explicó el Prelado.
Señaló que en cambio, “el catolicismo se distancia de muchas otras religiones” porque el creyente se encuentra con la necesidad de asumir las enseñanzas liberadoras de Cristo, las que aunque son exigentes, “regalan la vida”.
En ese sentido, explicó que una de estas ofertas con las que debe lidiar el fiel es el materialismo, desde cuya visión “caen valores esenciales como la vida, la familia, el trabajo, la justicia, la solidaridad, la naturaleza”.
“La misma sexualidad pierde aquello que la humaniza que es el amor. La cuestión se agrava cuando la visión materialista se instala en la función pública. Este inicio del siglo XXI genera diversas formas de descalificación y persecución a la propuesta cristiana”, advirtió Mons. Martínez.
El Obispo de Posadas recordó que la Iglesia a lo largo de su historia ha padecido “persecuciones directas o indirectas”. Por ello, señaló, el cristiano debe “tener una lectura crítica” de aquella información “que busca dañar o ridiculizar este camino de discipulado”.