KÖNIGSTEIN,
El P. Vasyl Hovera, delegado apostólico para los greco-católicos en Kazajstán y Asia, en la región de Karaganda, Kazajstán, informó que se ha develado un monumento que servirá como memorial de los mártires ucranianos del Gulag, en el cementerio de Mamin ubicado en la localidad de Dolinka.
Con este memorial se recuerda a muchas víctimas del sistema de prisión ruso conocido como Gulag, instaurado por Stalin y conformado por más de cien campos de trabajo, en donde más de 200 mil miembros del clero fueron encarcelados y muchos de ellos asesinados, una parte de las casi 800 mil personas que fueron fusiladas.
De manera especial se honra al beato Oleksiy Zarytskyi, fallecido en el hospital de la prisión de Dolinka el 30 de octubre de 1963, uno de los 27 mártires beatificados por Juan Pablo II el 27 de junio de 2001. Una capilla dedicada al nuevo mártir se inauguró en 2001, en la iglesia de la Protección de la Madre de Dios en Karaganda.
Como redentorista, el P. Hovera aseveró que este beato “siempre se ocupó incansablemente no solo de los ucranianos sino de los polacos, alemanes y rusos que se hallaban en condiciones inhumanas”.
La hermana María, una de las dos hermanas redentoristas del monasterio más pequeño de Kazajstán, agradeció y se unió en oración por la ayuda de la organización Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS) a ellas, las carmelitas, las franciscanas y a las siervas greco-católicas de Nuestra Señora Inmaculada; todas unidas en vigilias de oración.
500 mil católicos