Los activistas pro-vida consideran que la tecnología está de su parte en la lucha por la defensa del no nacido, pues los avances de la ciencia permiten apreciar con claridad que una mujer embarazada porta en el vientre a una persona humana.
El sitio LifeSiteNews.com informa que muchos avances tecnológicos radican en los progresos obtenidos con el ultrasonido que permite a las embarazadas observar el rostro del bebé, permitiendo que muchas cambien su opinión respecto al aborto y lo condenen.
“La tecnología ha permitido que alguien que no tenía ni voz ni rostro se convierta en un niño real”, indica Mary Spaulding Balch, directora de legislación estatal del Comité Nacional para el Derecho a la Vida. “En los 70’s y 80’s cuando se debatía el tema del aborto se hablaba de la madre. Ahora el bebé se ha convertido en parte del debate también”, agrega.
Para David Bereit de la American Life League, “existe una mayor conciencia en la gente de que el aborto es una injusticia, la destrucción de una vida humana inocente”.
Otras organizaciones pro-vida comentan que las investigaciones que demuestran el complejo desarrollo de los bebés en las primeras etapas de la vida también han permitido algunos progresos en la defensa de la vida del no nacido; así como los testimonios de mujeres que se sometieron a un aborto y que han sufrido severos daños emocionales y físicos a raíz de éste.
En todo el país, las leyes a favor de la vida se multiplican; desde restricciones en cuanto al tiempo de embarazo para abortar hasta restricciones para programas de educación sexual que lo promueven. Son ya 26 los estados que han prohibido el aborto después del tercer mes de embarazo; mientras que cuatro estados –South Dakota, Tennessee, Indiana y Ohio– lo prohibirán completamente permitiéndoles sólo en caso de peligro de muerte de la madre.