VATICANO,
La Oficina de Prensa de la Santa Sede publicó hoy la versión oficial de la Instrucción de la Congregación para la Educación Católica que descarta definitivamente la admisión al sacerdocio de personas con tendencias homosexuales arraigadas.
La Instrucción “Sobre los criterios de discernimiento vocacional de las personas con tendencias homosexuales en vista a su admisión al seminario y a las Órdenes Sagradas" fue aprobada por el Papa Benedicto XVI el 31 de agosto pasado. El Cardenal Zenon Grocholewski, Prefecto de la Congregación para la Educación Católica, lo firmó en Roma el 4 de noviembre de 2005, memoria de San Carlos Borromeo, Patrono de los Seminarios.
Según se anticipó hace unos días, el documento de seis páginas sostiene que los candidatos al sacerdocio deben alcanzar una madurez afectiva que les permita establecer una “relación correcta” con hombres y mujeres “desarrollando en él un verdadero sentido de la paternidad espiritual hacia la comunidad eclesial que le será confiada”.
Asimismo, recuerda que el Catecismo distingue entre actos y tendencias homosexuales. Los actos “se presentan como pecados graves” y son considerados “intrínsecamente inmorales y contrarios a la ley natural” por lo que no pueden ser aprobados en ningún caso.
Sobre las tendencias homosexuales “profundamente arraigadas”, la instrucción precisa que éstas “son también objetivamente desordenadas y frecuentemente constituyen una prueba”.
Sin embargo, precisa que estas personas “deben ser acogidas con respeto y delicadeza” y debe evitarse “toda discriminación injusta” pues “están llamadas a realizar la voluntad de Dios en su vida y a unir al sacrificio de la cruz del Señor las dificultades que pueden encontrar”.