La Iglesia Católica en Estados Unidos inició un programa de captación de vocaciones sacerdotales denominado “Pescadores de Hombres”, que ya se encuentra a disposición de las casi 200 diócesis y arquidiócesis del país para ayudar a los jóvenes que deciden entregar su vida al servicio de los demás y de Dios.
"La invitación de un párroco a la vida religiosa es el medio más eficaz para que un hombre considere el sacerdocio", señaló a la agencia EFE el Padre Edward Burns, Presidente del Comité de Vocaciones de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos y explicó que la “invitación personal” es la que decidió a más del 80 por ciento de los nuevos seminaristas.
Para el sacerdote, lo que afecta a la Iglesia no es tanto una "crisis de vocación" sino una "crisis de motivación" en la juventud. "Este programa es un reto. Nuestra Iglesia está necesitada de sacerdotes, en especial hispanos", indicó el presbítero. "Cuanto más crece el número de latinos en Estados Unidos, más necesitados estamos de sacerdotes que entiendan esta cultura y hablen su lengua", agregó.
Por ello, el Comité de Vocaciones preparó una versión en español de todo el material necesario para implementar el programa. Los centros que pasen del interés a la adopción del plan tendrán seis meses para poner en marcha cuatro fases de preparación de sus párrocos.
Las entrevistas juegan un papel principal en el proceso. Serán primero internas, para descubrir qué provoca la decisión de unirse al sacerdocio y después externas para transmitirlo a posibles candidatos.