BOGOTÁ,
El Presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana (CEC) y Arzobispo de Tunja, Mons. Luis Augusto Castro, invitó a los colombianos a trabajar por la consecución de la paz, desde una salida negociada y basada en el diálogo y el respeto.
En el marco del Congreso Nacional de Iniciativas por la Paz, Mons. Castro expuso en la conferencia inaugural, diez “anhelos” que tiene sobre la situación de Colombia. Exponiéndolos uno a uno, el Prelado ubicó como primer anhelo la consecución de la paz en este país como “don y tarea”, pidiendo a los colombianos invocar a Dios para poder lograr que este propósito se consolide.
Asimismo, el Prelado expresó su anhelo por la “liberación de todos los secuestrados que hay en el país, tanto de los que son víctimas de la extorsión como los llamados secuestrados políticos” e invitó a los secuestradores a dejar “aflorar lo mejor de su humanidad para que las consideraciones humanitarias primen sobre las consideraciones políticas y sean aquellas el motor que los lleve a la decisión de liberarlos”.
También manifestó su esperanza en que las personas que han dejado las armas, se “transformen en hombres y mujeres de paz mediante un proceso educativo, cultural, espiritual y social de reinserción”.
Refiriéndose al tema de la vida, Mons. Castro recordó la necesidad de “defender la vida desde la concepción hasta la muerte, la vida del no nacido, del niño, del joven llamado a las armas, del anciano, de los desplazados, de los amenazados, de los empobrecidos y de todas las víctimas que viven sumidas en el dolor”.
El Prelado invitó a los participantes en el Congreso Iniciativas por la Paz, a “trabajar por la paz” y entrar en “profunda sintonía, en una red de colaboración maravillosa, considerándonos cada uno como un hilo precioso e indispensable para tejer el tapete de la paz de Colombia”. Por otra parte, llamó a la sociedad civil a ser cada “vez más fuerte política, cultural y espiritualmente para comprometerse decididamente por la paz”.