SAN JOSÉ,
El Arzobispo de San José, Mons. Hugo Barrantes Ureña, señaló que la autodenominada “Iglesia Católica Reformada”, un grupo que opera en el país desde el año 2000 y que pretende aparecer en comunión con la Santa Sede, es “un grupo cismático. Un grupo separado de la Iglesia Católica”.
A propósito de la reciente “ordenación” diaconal de una mujer en Costa Rica, dentro de este grupo, Mons. Barrantes indicó que los cismáticos aceptan “en sus filas a sacerdotes en situación irregular, y a fieles católicos que no quieren someterse a la disciplina eclesiástica”.
“La Iglesia Católica Reformada no está en comunión con el Santo Padre. De hecho, sus obispos no figuran en el Anuario Pontificio, no efectúan la visita ad Limina al Santo Padre. Por tanto, estos obispos no están en comunión con el Papa ni con ningún Obispo que esté en comunión con Pedro”, aseveró el Prelado costarricense.
Asimismo, descartó que la Iglesia haya marginado a las mujeres, como afirman los miembros del grupo cismático en cuestión. “La presencia y el papel de la mujer en la vida y en la misión de la Iglesia, si bien no están ligados al sacerdocio ministerial, son, no obstante, totalmente necesarios e insustituibles".
"En este sentido la Iglesia hace votos por que las mujeres cristianas tomen plena conciencia de la grandeza de su misión: su papel es capital hoy en día, tanto para la renovación y humanización de la sociedad, como para descubrir de nuevo, por parte de los creyentes, el verdadero rostro de la Iglesia”, recordó.
Del mismo modo, evocó a Juan Pablo II quien declaró que “la Iglesia no tiene en modo alguno la facultad de conferir la ordenación sacerdotal a las mujeres, y que este dictamen debe ser considerado como definitivo por todos los fieles de la Iglesia”.