MADRID,
Haciendo “una muy singular excepción”, el Obispo emérito y actual administrador apostólico de Tenerife, Mons. Felipe Fernández, ordenó sacerdote al pastor Evans David Gliwitzki, un ministro anglicano casado, con dos hijas y una nieta, convirtiéndose este caso en el primero de esta naturaleza realizado en España.
Gliwitzki, de 64 años de edad y natural de Zimbabwe, donde fue párroco y vicario general de la diócesis de la comunidad anglicana, recibió el sacramento del orden en la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción, en La Laguna (Tenerife). Participaron en la ceremonia, los familiares del nuevo sacerdote y gran parte del clero de la diócesis tinerfeña.
Tras su ordenación, Gliwitzki “por supuesto seguirá estando casado con su esposa, Patricia”, señaló el Obispado en un comunicado, en el que precisó, sin embargo, que ésta no es una vía de acceso a la abolición del celibato católico “sino una muy singular excepción en consideración a su situación” y a “sus muy peculiares circunstancias al provenir de la Iglesia Anglicana, una comunidad que sí acepta el matrimonio de sus ministros”.
Por su parte, el administrador apostólico de la diócesis nivariense mostró su satisfacción por la ordenación. Mons. Fernández aceptó desde el principio la propuesta de la Conferencia Episcopal Española de supervisar el período de formación en la teología católica, y que solicitó la autorización pertinente para su ordenación como sacerdote a la Santa Sede.
El Obispado señaló también que Gliwitzki había sido ordenado diácono en junio, un paso previo al sacerdocio. El nuevo ministro católico dejó de ser oficialmente ministro anglicano cuando solicitó ser acogido en la Iglesia Católica y pidió el inicio del proceso para su ordenación sacerdotal.
La solicitud de ministros anglicanos de ser ordenados sacerdotes católicos "es algo más frecuente" en el Reino Unido y en este caso, como en el de Gliwitzki, se estudia las circunstancias individuales y si el postulante cumple los requisitos, aseguró una fuente diocesana.