El Presidente de la Conferencia Episcopal Mexicana (CEM) y Obispo de León, Mons. José Guadalupe Martín Rábago, pidió al gobierno federal establecer la “cadena perpetua” para los secuestradores.
En México no está establecida la pena de muerte, por lo que el Prelado indicó que “la pena máxima que se podría imponer a los secuestradores es la prisión perpetua".
Ante la gran ola de secuestros que vive México, Mons. Martín Rábago consideró que al haber un “atentado tan grave contra la persona, como es privarlo de su libertad, debe haber una justicia que, de manera fuerte, castigue esta clase de faltas para que de alguna manera inhiba la tendencia a conseguir dinero fácil".
El Prelado agregó que para los Obispos es más importante trabajar por las causas estructurales que provocan el secuestro, por lo que los Prelados de las regiones de Bajío y Occidente no excomulgaron a los secuestradores, sino que optaron por apelar ante el gobierno para que impongan penas más fuertes que contribuyan a la disminución de este atentado a la libertad.
Las Mejores Noticias Católicas - directo a su bandeja de entrada
Regístrese para recibir nuestro boletín gratuito de ACI Prensa.