BUENOS AIRES,
El Arzobispo de Córdoba y Presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Familiar, Mons. Carlos José Ñañez, pidió a las familias argentinas entusiasmar a los pastores para que refuercen su compromiso con ellas.
Al inaugurar el Encuentro Nacional de Pastoral Familiar, que se celebrará hasta el 15 de agosto, Mons. Ñañez señaló la urgencia de “un entusiasmo que brotando de la familia misma se transmita a todos los miembros del pueblo de Dios, especialmente a los Pastores”.
“Esto último podría parecer un poco paradójico: ¿no son acaso los pastores quienes deben entusiasmar a todo el pueblo de Dios? De ordinario es así, pero no es menos cierto que hoy, frente a las complejas y difíciles situaciones que recaen sobre las espaldas y el ánimo de los pastores, necesitamos del aporte de los laicos, especialmente de los matrimonios y de sus familias, para que entusiasmen y fascinen a sus pastores testimoniándoles y hablándoles de la ‘íntima belleza de la familia’, para que ellos se sientan a su vez comprometidos a ofrecerles lo mejor de su dedicación para ayudarles a crecer", indicó.
El Arzobispo pidió a los participantes “abordar la tareas de este encuentro es el de auténtica esperanza que, sin ingenuidad frente al complejo y desafiante panorama actual, sepa encontrar razones para trabajar con entusiasmo e impulso para luchar sin desfallecer por el bien del matrimonio y la familia, tal como Dios Nuestro Señor la quiere hoy".
Mons.. Ñañez señaló que "sin despreciar los eventos especiales y extraordinarios, nuestra atención debe centrarse en lo cotidiano y en saber valorar lo pequeño y en trabajar desde allí con un ánimo abierto y esperanzado”.
“Estar atentos los agentes pastorales -cuidarnos nosotros mismos- para no perder las motivaciones. el ánimo, las fuerzas. Nuestra tarea siempre será desproporcionada en relación con las necesidades, pero tendrá el valor de signo, o para decirlo con términos evangélicos , será como la semilla de mostaza que siendo pequeña tiene el desarrollo insospechado", indicó.