MADRID,
La especialista en temas de familia de la Universidad de Arkansas (Estados Unidos), Hillary Wilson, recordó a los españoles que deben preocuparse por respetar el derecho de los niños a tener padre y madre, antes que buscar el consenso social sobre la conducta homosexual.
En medio de los ataques contra el catedrático Aquilino Polaino, que osó presentar ante el Senado el “perfil psicopatológico” de los homosexuales, Wilson explicó que la reacción de asociaciones “profesionales” contra su postura era de esperarse.”¿Cuándo fue la última vez que no ‘le fue en feria’ a alguien que sugirió que la homosexualidad fuera algo más que un ‘estilo de vida sano y laudable’ de individuos maduros, libres y autónomos?”, ironizó la experta y consideró que “Polaino mismo sabía que sus palabras ante el Senado equivaldrían a una ‘ejecución pública’ de su persona y su reputación profesional”.
Según Wilson la patología de la homosexualidad o su eventual transmisión por educación, “son cuestiones de mucho peso en este debate, pero no son, ni deben ser los únicos temas que lo deciden”.
“Entre tanto apuro por disculpar, retractar, y reafirmar el buen carácter de la homosexualidad, parece ser que se ha perdido de vista el tema que originó toda esta polémica: ¿se debe o no otorgar el derecho de adoptar a parejas compuestas por personas del mismo sexo?”, agregó.
Para Wilson, “negarle la posibilidad de adoptar a una pareja de personas del mismo sexo no es una discriminación contra las personas con tendencias homosexuales. El problema, pues, no es el de la orientación sexual, sino la identidad y el objetivo de la adopción en sí: la adopción no es dar un niño a una pareja que lo quiere, sino buscar una familia para un niño que la necesita”.
“Un niño en necesidad de ser adoptado es un niño que se encuentra en una situación extraordinaria y anormal: es un niño que no tiene padres. Lo que busca la adopción es ‘crear’ desde el punto de vista jurídico y social una relación familiar semejante a la natural: un padre, una madre, y un hijo. No, por ejemplo, dos padres y una madre, o tres amigos, o una persona soltera porque eso no existe en la filiación biológica natural”, precisó.