LA PAZ,
El Obispo de El Alto y Secretario General de la Conferencia Episcopal Boliviana, Mons. Jesús Juárez, exhortó a las autoridades, políticos y representantes de los sectores sociales a buscar “respuestas reales y definitivas” para evitar que la violencia se apodere del país.
El Prelado señaló que los obispos “no podemos estar callados ante la situación que se cierne en el país”, sobre todo ante un fenómeno creciente que puede generar mayor violencia e intolerancia.
“Estamos viviendo momentos de incertidumbre y de mayor enfrentamiento”, alertó Mons. Juárez, por lo que exigió a los responsables dejar de lado aquellas posturas “que conduzcan a radicalizar la situación o mostrar absoluta indiferencia”.
El Obispo de El Alto recordó que antes que los intereses sectoriales o regionales están los valores y derechos de las personas, el respeto a la Constitución Política y al sistema democrático. Asimismo, pidió pensar “en la sangre ya derramada de nuestra querida Bolivia”.
Es momento, indicó, de hallar “respuestas reales y definitivas a las ansias” que tiene el pueblo de una “mayor participación, justicia social y convivencia fraterna”. Por ello, aconsejó actuar con “serenidad, sabiduría y celeridad”, porque el destino del país depende de las acciones que se tomen hoy.
Asimismo, pidió a la población de El Alto, cuyos representantes han amenazado al Gobierno con radicalizar sus medidas, buscar el diálogo y dejar de lado la violencia. Añadió que conseguir una convivencia fraterna y pacífica depende de todos, y que “la Iglesia jamás va a estar ausente” de aquellas iniciativas que promuevan “el bienestar, la justicia social y el progreso de esta querida nación”.