La teóloga Pia de Solenni aclaró a los estadounidenses que “el Papa Benedicto XVI no puede cambiar la posición de la Iglesia sobre el aborto, el control de la natalidad o la ordenación de sacerdotisas ya que las enseñanzas que se refieren a estos temas fluyen del corazón mismo de la fe católica”.
En una columna publicada por el diario Washington Post, de Solenni afirmó que si bien el Papa no cambiará la posición de la Iglesia en temas fundamentales como la defensa de la vida, los anticonceptivos y la ordenación de mujeres, “los católicos pueden esperar de él extensas explicaciones, las que sean necesarias, para que se comprenda el por qué de estas enseñanzas”.
“Este hombre fue considerado liberal en sus tiempos de profesor y desde que asumió responsabilidades en la Iglesia es considerado un conservador. Su pensamiento no ha cambiado sustancialmente pero sus percepciones sí. Podemos quedarnos con las percepciones que otros han creado o podemos preocuparnos por conocerlo en realidad”, declaró la teóloga, en respuesta a quienes insisten en tildar al Papa de “conservador”.
En su columna titulada “Nuestro papel en la Iglesia”, de Solenni comentó el documento del entonces Cardenal Ratzinger “Sobre la colaboración del hombre y la mujer en la Iglesia y en el mundo” publicado el año pasado. La teóloga explicó que el documento busca responder a las constantes preguntas que se hacen actualmente sobre el rol del hombre y la mujer, de modo tal que las diferencias entre los sexos puedan ser entendidas con claridad y positivamente. El documento también explica que las diferencias entre los sexos son un elemento esencial dentro de la identidad del ser humano.
En cuanto a las diferencias entre el hombre y la mujer, de Solenni, también Directora del Consejo de Investigación Familiar, afirmó que las enseñanzas de la Iglesia en cuanto a éstas son “constructivas, contribuyen a lo que hacemos y a ser quiénes somos” y añadió que “en otras palabras debemos ver en todo lo que hace una persona a un hombre o a una mujer, no a un individuo sin género”.
La teóloga manifestó que espera que “Benedicto XVI continúe su magisterio en cuanto al don único que solo la mujer puede aportar a la Iglesia”.