BUENOS AIRES,
A poco de iniciar sus deliberaciones, la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Argentina dio a conocer un enérgico comunicado en el que condena el aborto y pide a los legisladores rechazar el controvertido protocolo feminista conocido por sus siglas en inglés CEDAW.
El documento, titulado “Apostemos siempre por la vida” recuerda que el primero de los derechos humanos “es precisamente el derecho a la vida, que debe ser protegida desde la concepción hasta la muerte natural”.
El documento recuerda que “la ciencia nos enseña que la concepción genera una nueva vida humana con su propio código genético, distinto al de los padres”, por lo que “su destrucción voluntaria constituye un crimen”; y por ello la ley argentina “considera al aborto un delito”.
Los obispos advierten además que los argumentos esgrimidos para legalizar el aborto “reflejan los lineamientos neocolonialistas que algunos organismos internacionales intentan imponer a nuestro país y a toda América Latina”; y recuerdan que “nuestro compromiso a favor de los derechos de la mujer no puede depender de acuerdos o recomendaciones que pretenden garantizar la práctica del aborto como un servicio público”.
“A este propósito –agregan– advertimos particularmente a nuestros legisladores sobre el peligro de dependencia cultural que entrañaría la inminente ratificación del Protocolo Facultativo de la CEDAW”.
“Defendamos la vida, cuidemos la vida, apostemos siempre por la vida”, concluye el comunicado.