DENVER,
Una muestra fotográfica que celebra la vida, realizada por el Movimiento de Vida Cristiana (MVC) la semana pasada en el campus de Auraria, Denver, atrajo el favor de muchos y la oposición de otros.
La exhibición, que se inició el 3 de marzo y se realizó en el salón del edificio del Tivoli Studen Union, incluía una serie de fotografías relacionadas con las Escrituras, algunos poemas y reflexiones. Con el título “Celebración de la Vida” la exposición constaba de 70 fotos de niños, familias, paisajes y vida silvestre tomadas por media docena de fotógrafos, junto con algunas pinturas religiosas locales.
La exposición atrajo a muchos que, impresionados, volvían luego con otros. También atrajo a algunos que aparentemente se oponían al mensaje pro-vida de la misma, ya que dejaron una caja de preservativos e información anticonceptiva al día siguiente de la inauguración del evento.
“Claro que los tiramos todos”, señaló Susana Nieto, consagrada y encargada de la organización del evento haciendo alusión a la caja de preservativos que les "regalaron". “No eran fotografías de bebés abortados. Mostrábamos la alegría, la ternura de la vida. Todo era muy positivo. Que alguien reaccione agresivamente cuando nosotros no hemos sido para nada agresivos, no sé...”, añadió Nieto.
Por su parte, Lorena Capone, quien tenía al menos una foto en la exhibición, declaró que “creo que la exposición es hermosa. Hay muchas expresiones distintas que celebran la vida, muy variadas todas”.
Entre las fotos se podía apreciar una de un niño pequeño con la sonrisa de oreja a oreja, los brazos extendidos y las manos hacia arriba. La foto captura su alegría con la leyenda “¡Estoy feliz, muy feliz! Otras fotos mostraban un acercamiento de la cara de un niño pequeño durmiendo, una mano de un padre sosteniendo la de su hijo recién nacido, una jovencita esquiando, unos hermanos pequeños corriendo en un aparente jardín interminable, entre otras. Las fotos de vida silvestre muestran, por ejemplo, al sol en lo más elevado de un bosque en Aspens con la leyenda “Un nuevo día de vida” y un pequeño conejo marrón con la siguiente leyenda “hoy pasé cinco minutos sin hacer cosas, pero siendo”.