SANTIAGO,
El próximo 23 de octubre, el sacerdote jesuita Alberto Hurtado, será canonizado junto a cuatro religiosos europeos. Aunque la fecha fue oficializada el jueves pasado, fuentes eclesiales ya estiman que más de siete mil chilenos asistirán a la ceremonia en el Vaticano.
El consistorio cardenalicio que anunció la canonización del Padre Hurtado fue presidido por el Secretario de Estado Vaticano, Cardenal Angelo Sodano, en ausencia del Papa Juan Pablo II.
El Presidente Ricardo Lagos, que se proclama agnóstico, aún no ha confirmado su asistencia a la canonización del segundo santo chileno. Sin embargo ha manifestado que "debemos estar muy orgullosos y creo que ese tiene que ser un momento de profunda reflexión entre todos los chilenos sobre qué significó el Padre Hurtado y qué mensaje nos deja para hacerle un homenaje".
Con el anuncio de su canonización, terminó un proceso de 29 años iniciado en 1976 y que incluyó la comprobación de dos milagros atribuidos al sacerdote, fallecido en 1952.
En la ceremonia de octubre también serán canonizados el Arzobispo ucraniano Josef Bilczewski, el sacerdote ucraniano Zygmunt Gorazdowski, y los italianos Gaetano Catanoso y Felice de Nicosia.
El ex prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, Cardenal Jorge Medina, manifestó que “naturalmente, como todos los chilenos, estamos muy contentos porque el Padre Hurtado es una gran figura en la historia espiritual de nuestro país”.