MADRID,
Mediante una nota de prensa publicada este viernes, la Conferencia Episcopal Española rechazó un proyecto de ley que concedería al País Vasco una autonomía reñida con la unidad española.
En el comunicado, los obispos recuerdan lo ya afirmado en su “Instrucción Pastoral Valoración moral del terrorismo en España”; y señalan que “las naciones, en cuanto ámbitos culturales del desarrollo de las personas, están dotadas de una ‘soberanía’ espiritual propia y, por tanto, no se les puede impedir el ejercicio y cultivo de los valores que conforman su identidad”
Sin embargo, los obispos destacan que las naciones, “aisladamente consideradas, no gozan de un derecho absoluto a decidir sobre su propio destino. Esta concepción significaría, en el caso de las personas, un individualismo insolidario”.
“La Doctrina Social de la Iglesia –destacan- reconoce un derecho real y originario de autodeterminación política en el caso de una colonización o de una invasión injusta, pero no en el de una secesión”.
En consecuencia, La CEE concluye que “no es moral cualquier modo de propugnar la independencia de cualquier grupo y la creación de un nuevo Estado, y en esto la Iglesia siente la obligación de pronunciarse ante los fieles cristianos y los hombres de buena voluntad”.
Según los obispos, “cuando la voluntad de independencia se convierte en principio absoluto de la acción política y es impuesta a toda costa y por cualquier medio, es equiparable a una idolatría de la propia nación que pervierte gravemente el orden moral y la vida social”.