BUENOS AIRES,
El Arzobispo de Corrientes, Mons. Domingo Castagna, aseguró que en una recta concepción de la Iglesia "no encajan los términos políticos de 'progresistas' y 'conservadores'".
"No entenderla desde su innegable dimensión de fe deriva en un manoseo irrespetuoso y deformante de su identidad", aseguró el Prelado en su reflexión radial semanal.
Asimismo, Mons. Castagna señaló que "actualizar es revitalizar sobre la base de los valores perennes", y sobre esa base se renovó la Iglesia tras el Concilio Vaticano II.
Sin embargo, reconoció que "no todos lo hayan entendido debidamente, por lo que se ha producido una peligrosa oscilación entre conservadurismo rígido y paralizante, y el 'borrón y cuenta nueva' del progresismo irresponsable y sin fronteras".
El Arzobispo correntino insistió en que "no es bueno que, quienes deben hacerlo, dejen de recordar la vigencia de los valores permanentes", porque "el viento estridente de los cuestionamientos provoca temor, hasta inseguridad, en quienes están envueltos en la tormenta".
Mons. Castagna advirtió que “acallar la verdad evangélica porque no será comprendida, o molestará a los poderosos, procede de un peligroso enfriamiento de la fe”. Una Iglesia, aseguró, “tibia en la fe no despierta controversias, pero tampoco es referencia clara para la conversión”.