QUITO,
El Secretario General de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE), Mons. José Vicente Eguiguren, reclamó proteger la vida desde la concepción y retirar del mercado la abortiva píldora del día siguiente.
Los comerciantes del polémico fármaco en Perú quieren repetir su estrategia en Ecuador. A través de la ONG Corporación para la Prevención de Embarazos no Deseados (Copprende) –cuyo equivalente en Perú es Apprende-, los comerciantes han comenzado una agresiva campaña publicitaria en la que niegan el tercer mecanismo abortista del fármaco.
Mons. Eguiguren precisó que “es el derecho de esa vida humana el que hay que proteger” y reiteró la necesidad de suspender la venta de Postinor 2, nombre de marca para Levonorgestrel 0.75 mg.
Postinor 2 se vende en Ecuador desde el lunes pasado y el principal vocero de los comerciantes es Alfredo Guzmán, un médico peruano que labora para Copprende y que fue uno de los principales promotores del fármaco abortivo en Perú.
Su discurso en Ecuador es similar al empleado en Perú, Guzmán asegura contra las evidencias científicas reconocidas internacionalmente que el fármaco no es abortivo, y que ayudará a reducir “embarazos no deseados”. Lo que Guzmán no dice es que en países como Inglaterra, donde esta píldora se vende sin receta, su consumo no ha reducido los embarazos ni los abortos quirúrgicos.
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