VATICANO,
En el mensaje anual que el Vaticano dirige a los musulmanes con motivo del final del Ramadán, el Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso pidió a quienes profesan esa religión unir esfuerzos con los católicos para defender a los no nacidos en los foros internacionales.
En los últimos años, muchos países de mayoría musulmana se aliaron a la Santa Sede en las Naciones Unidas en contra del aborto.
“Debemos unir nuestros esfuerzos recordando la dignidad de cada ser humano, cuya existencia Dios mismo desea, denunciando sin tregua todo lo que degrada a los niños y luchando con todas nuestras fuerzas contra aquellas 'estructuras de pecado', por usar una expresión de Juan Pablo II. Somos conscientes de que en el futuro de los niños está en juego el de la humanidad entera", explica el mensaje.
La Santa Sede reflexionó sobre el tema del Ramadán para este año: "Los niños, don de Dios para el futuro de la humanidad"; y recordó que todo niño “tiene un derecho inalienable a la vida y, en la medida de lo posible, tiene también el derecho de ser acogido en el seno de una familia natural y estable. Tiene además derecho de ser nutrido, vestido y protegido. También tiene derecho a ser educado".
"Consideráis que un niño es una bendición de Dios, en particular para sus padres. Nosotros, los cristianos, compartimos esta visión religiosa pero nuestra fe cristiana nos enseña, al mismo tiempo, a descubrir en el niño el modelo de nuestras relaciones con Dios", sostiene.
Asimismo, advierte que “los niños se han beneficiado, al menos en algunas partes del mundo del progreso en el respeto de los derechos humanos” pero es verdad que “siguen sufriendo a causa de diversos males (trabajo infantil, abusos sexuales, enrolamiento en la guerra, separaciones familiares, drogas, tráfico de órganos)".