MADRID,
Este domingo 31, víspera de la Solemnidad de Todos los Santos y un día antes de que la Iglesia conmemore en la liturgia a los Fieles Difuntos, el Obispo de Ávila, Mons. Jesús García Burillo, hizo un llamado a vivir de cara a la muerte, la “hora de la verdad” y vivir el amor para encontrar la vida eterna.
En un programa de la cadena COPE, el Prelado recordó que la “hora de la muerte, bien podemos decir que es la hora de la verdad”. Se trata de la “hora donde sólo cuenta lo definitivo. Nuestra admiración por el triunfo, por el poder, por la riqueza, sostenida con empeño a lo largo de nuestra vida se desvanecen en un momento. ¿Para qué han servido todos nuestros afanes? Toda nuestra vida queda relativizada en un instante”.
En su intervención, el Obispo llamó la atención sobre lo que realmente es necesario para ese momento. Así, resaltó la fe y esperanza en la resurrección de los muertos y en la vida eterna, así como la necesidad de estar preparados.
“La cuestión es: ¿cómo vamos preparando este momento final? o cómo cultivamos esta vida eterna que ya poseemos pero que todavía no ha eclosionado en el encuentro final con el Resucitado. La respuesta sería: sólo el amor es la forma digna de vivir, sólo el amor nos conduce a la voz final: venid benditos de mi Padre”.
Mons. García Burillo concluyó su mensaje a felicitar “en la fiesta de Todos los Santos a quienes han obtenido ya la gloria de Jesucristo: todos los mártires, confesores, pastores, vírgenes consagradas”.
Asimismo “oremos, en el día de los Difuntos por todos aquellos, hermanos nuestros, que esperan en el camino de la purificación, la recompensa final. Nuestras plegarias hacen más corto su tiempo de espera”, concluyó.