MADRID,
El Arzobispo de Valencia, Mons. Agustín García-Gasco, defendió la escuela concertada católica, elegida por gran cantidad de españoles e inmigrantes, y advirtió que “resultaría especialmente grave que se intentara destruir por aquellos defensores de un laicismo trasnochado".
Según el Arzobispo, quienes "creen que la subsistencia de la llamada escuela pública ha de pasar por la muerte de la docencia de iniciativa social o concertada”, “de facto, minusvaloran la enseñanza pública y sus profesionales".
El Prelado publicó una carta pastoral titulada “El Estado ante la educación”, en la que precisa que estas personas "crearían un tremendo desconcierto por hurtar un legítimo derecho a la libre opción educativa”.
El Arzobispo recordó que la educación “es un derecho que entronca con el libre desarrollo de la personalidad y con la propia esfera de la libertad personal”. En la actualidad el sistema de conciertos educativos “ha venido a garantizar para los padres la libre elección de centros, de cualquier centro, ya sea de ideario católico o no”.
Asimismo, Mons. García-Gasco señaló que “como tantas otras actividades de relevancia social financiadas por el Estado, el contenido económico de los conciertos educativos no es un privilegio” y defendió que “la libre elección por los padres del tipo de escuela que quieren para sus hijos es un derecho” considerando, por ello, que “quien ama la libertad posibilita la libre elección”.
Según el Prelado valenciano, la preocupación de los estados por la educación “es algo verdaderamente tardío en la historia de la humanidad”. Así, resaltó que “durante siglos la educación era considerada como una cuestión privada de cada individuo”. La historia de los docentes “es mayoritariamente la historia de actuaciones particulares”.