En la primera congregación general de cardenales en Roma el martes, los aproximadamente 60 purpurados asistentes eligieron la fecha del funeral del Papa Francisco y suspendieron las celebraciones de beatificación.
La reunión a puertas cerradas para discutir el próximo cónclave y otros asuntos relacionados con el interregno tuvo lugar a las 9:00 a.m. (hora de Roma) el día después de la muerte del pontífice, mientras los cardenales se apresuraban en llegar desde todo el mundo a la Ciudad Eterna.
Como parte del período de interregno, los cardenales se reunirán con frecuencia para tomar diversas decisiones sobre el próximo funeral papal y el cónclave.
Los cardenales fijaron el funeral papal para el sábado 26 de abril a las 10:00 a.m., hora de Roma, en la Plaza de San Pedro. El Papa Francisco será enterrado en la Basílica de Santa María la Mayor, por petición propia, tras el funeral. El cuerpo del Papa Francisco será trasladado el miércoles por la mañana a la Basílica de San Pedro para que los fieles puedan presentarle sus respetos.
El funeral del Papa Francisco es la primera misa de los "Novendiales", un ciclo de nueve días de preparación litúrgica y espiritual para el cónclave. Cardenales llegarán de todo el mundo para participar en las congregaciones generales previas al cónclave, conocidas como "sesiones preparatorias".
La asamblea de una hora y media del martes comenzó con un momento de oración silenciosa por el descanso del alma del difunto Santo Padre.