El Cardenal Leonardo Steiner, Arzobispo de Manaos, recordó este lunes al Papa Francisco como “el gran continuador del Concilio Vaticano II”, subrayando que, tras Pablo VI, ningún otro pontífice impulsó tanto el legado de aquel histórico encuentro que, entre 1962 y 1965, transformó la Iglesia.
Steiner, primer cardenal de la Amazonía brasileña, destacó cómo Francisco no solo defendió la renovación conciliar, sino que la vivió con firmeza, resistiendo presiones internas y apostando siempre por una Iglesia abierta, sin nostalgias del pasado y atenta a los desafíos del presente.
“Es evidente que la Iglesia sigue su camino. Avanza despacio, pero avanza. Y, sin duda, ya no será la misma”, afirmó el arzobispo en una rueda de prensa tras el anuncio de la muerte del Papa, a quien vio como un pastor que supo despertar a la Iglesia para abrazar la diversidad, impulsar la participación de las mujeres y acoger a todos, especialmente a los más vulnerables.
Dom Leonardo Steiner, quien será uno de los siete cardenales brasileños con derecho a voto en el próximo cónclave, fue designado Arzobispo de Manaos por Francisco en 2019 y creado cardenal en agosto de 2022. Para Steiner, su nombramiento fue un reconocimiento y una invitación del Papa a poner en práctica lo debatido en el Sínodo para la Amazonía de 2019.
“A veces queremos volver a gestos del pasado, cuando en realidad necesitamos gestos nuevos, quizá más significativos, que respondan al tiempo en que vivimos”, dijo.
Para el Arzobispo de Manaos, el Papa Francisco “no quiso volver atrás”. Mencionó, por ejemplo, la celebración de la Eucaristía según el misal de San Pío V, la Misa tradicional en latín previa a la reforma conciliar. Su uso, que había sido liberalizado por Benedicto XVI, fue severamente restringido por Francisco mediante el motu proprio Traditionis custodes en 2021.