Este Jueves Santo, fue el Cardenal Mauro Gambetti, Arcipreste de la Basílica de San Pedro, el encargado de presidir la Misa de la Cena del Señor en el Vaticano, mientras el Papa Francisco se sigue recuperando.
Horas antes, el Santo Padre se reunió con 70 presos en la cárcel Regina Coeli de Roma, a quienes les recordó que “me gusta hacer cada año lo que hizo Jesús el Jueves Santo, el lavatorio de los pies, en la cárcel”.
“Este año no puedo hacerlo, pero sí puedo y quiero estar cerca de vosotros. Rezo por vosotros y por vuestras familias”, les expresó.
Al celebrar la Misa en la Basílica de San Pedro, el Cardenal Gambetti recordó que la primera pascua judía “se desarrolla en Egipto en un contexto de esclavitud, de opresión, de sufrimiento”.
“También la Pascua que celebra Jesús, verdadera y definitiva, se desarrolla en un contexto de prueba, injusticia, acoso, calumnia, enfermedad, violencia, miedo, soledad. Jesús desea ardientemente alimentar la intimidad, la familiaridad del hogar doméstico, la amistad del cenáculo, la fraternidad de la asamblea eclesial”, dijo.