La escultura Be Welcoming (Sean acogedores), obra del artista canadiense Timothy Schmalz, fue instalada este martes en la columnata de la plaza de San Pedro, el espacio abierto diseñado como un gran abrazo de fe por el arquitecto del barroco Gian Lorenzo Bernini.
Según informó el Dicasterio para el Servicio de la Caridad que dirige el cardenal polaco Konrad Krajewski, la estatua de bronce “da vida a la Sagrada Escritura a través del arte, permitiendo a la gente tener una experiencia física con las Escrituras”.
El lugar donde ha sido colocado no es causal. Está muy cerca de las duchas que en 2019 el Papa Francisco pidió instalar para que pudieran asearse las personas sin techo que malviven en los alrededores de la plaza de San Pedro.
A poco metros de allí se encuentra el Ambulatorio Madre de Misericordia, que está dotado con tres salas de consulta, así como equipos de primer diagnóstico que funcionan para ofrecer un servicio médico a los pobres.
Ambos proyectos fueron promovidos por la Limosnería Apostólica, el departamento encargado de obras de caridad del Pontífice.
Según explicó el Dicasterio para el Servicio de la Caridad, el extranjero representado en la escultura “que parece vivir como un vagabundo, con sus pertenencias guardadas en una bolsa y un bastón que sugiere un largo viaje, invita, sin embargo, a sentarse a su lado”.