MADRID,
El Arzobispo de Toledo, Mons. Antonio Cañizares Llovera, presentó el Plan Pastoral de la diócesis para los próximos cinco años en el que se presentan objetivos y acciones cuyo fin último es “impulsar una pastoral misionera, centrada en la experiencia de Dios en Cristo, para hacer de Toledo un diócesis evangelizada y evangelizadora”.
Según explicó el Arzobispo Primado de España, el plan se divide en programas anuales que, a su vez, tienen objetivos generales y concretos.
Así, para el curso 2004-2005 se intensificará la experiencia de Dios en Cristo a través del fomento de la vida de oración y encuentro con Dios a nivel personal, familiar y comunitario, la revitalización de las celebraciones litúrgicas, especialmente la Eucaristía dominical y la difusión del conocimiento de la Sagrada Escritura.
Para lograr estos primeros objetivos, el Arzobispo anunció la reorganización de la escuela diocesana de formación y la celebración de un Congreso Eucarístico Diocesano.
En el plan quinquenal Mons. Antonio Cañizares expone los planteamientos que inspiran el Plan Pastoral y realiza una reflexión sobre “la situación en la que vivimos”. Al respecto lamentó que la secularización de la sociedad esté provocando una “pérdida de sentido de Dios” y una “quiebra de la Humanidad”. Por ello, el Plan pretende “intensificar la acción evangelizadora de la Iglesia”, a fin de que la humanidad recupere “la defensa del hombre y el respeto a la moral”.
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