La Iglesia Católica lamentó y condenó el asesinato de ocho jóvenes y las heridas sufridas a otros más, algunos de ellos pertenecientes a la pastoral juvenil, quienes fueron atacados por un comando armado en Guanajuato, México.
Según relató Mons. Enrique Díaz, Obispo de Irapuato —diócesis donde ocurrieron los hechos— el incidente sucedió cerca de la parroquia de San José de Mendoza, en el municipio de Salamanca.
Relató que los jóvenes se encontraban en un parque público, “conviviendo después de la celebración de la Santa Misa, a las 7:30 pm aproximadamente, cuando llegaron unos hombres armados a donde se encontraban y abrieron fuego”.
Hasta el momento no se ha esclarecido el motivo del ataque. El Municipio de Salamanca informó que trabaja en estrecha colaboración con las autoridades federales y estatales “para identificar y capturar a los responsables de estos ataques, los cuales han alterado la paz y tranquilidad de las familias salmantinas”.
No es la primera vez que un ataque armado cobra la vida de jóvenes en esta zona. La noche del 3 de enero, sujetos armados a bordo de una motocicleta dispararon más de 20 veces contra un grupo de adolescentes que jugaba en la calle, causando dos muertos y tres heridos.