VATICANO,
En un discurso al Consejo ejecutivo de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), el Observador Permanente de la Santa Sede ante este organismo, Mons. Francesco Follo, advirtió que no es posible construir una ética global sin el pleno respeto a la dignidad de la persona humana.
“Si la UNESCO quiere promover la universalidad y la eficacia de las normas éticas que están estipuladas en el documento sobre ética de la economía debe esforzarse por realizar una reflexión fundamental sobre la exigencia universal de respeto del ser humano”, dijo el Prelado.
Monseñor Follo indicó en este sentido un “punto débil”, es decir “la reducción de problemas morales a cuestiones puramente ético técnicas, olvidando la cuestión de la universalidad de las normas propuestas”.
El Prelado concluyó ennumerando tres razones para que se haga una reflexión filosófica en los programas éticos:
· “La filosofía como discurso sobre la realidad y el significado es el agente mediador del diálogo que puede tener lugar entre ciencia y ética”.
· Su carácter de medio “para discutir la validez de las normas y el carácter universal de las mismas”.