La imagen del Nazareno de San Pablo, que inspira una gran devoción popular en Caracas, comenzó su peregrinación por los templos jubilares de la capital de Venezuela, en el marco del Jubileo de la Esperanza y de los 350 años de su consagración.
Se trata de una estatua de Jesús con la cruz a cuestas, vestido de púrpura, que llegó a Venezuela a mediados del siglo XVII. Desde entonces, los católicos le piden favores que luego “pagan” acompañando su peregrinación cada Miércoles Santo, en la que ofrecen velas y orquídeas, la flor nacional.
Según explica la Arquidiócesis de Caracas, se trata de una de las devociones más arraigadas en el pueblo venezolano, que llega de todos los rincones del país a Caracas para expresar su fe de las maneras más diversas.
El 8 de marzo, la sagrada imagen partió a la parroquia de Nuestra Señora del Carmen y el día siguiente, 9 de marzo, llegó a la parroquia de Nuestra Señora de los Dolores. En ambos templos, los devotos llenaron las calles para acompañar al Nazareno con oraciones y cantos. El itinerario del Nazareno como “Misionero de la Esperanza” continuará este 15 de marzo, cuando llegue a la parroquia de Nuestra Señora del Rosario y se extenderá hasta el próximo 6 de abril.
El Obispo Auxiliar de Caracas, Mons. Carlos Márquez, reflexionó sobre la aparente contradicción de una imagen de Jesús sufriente como símbolo de esperanza. Al ser consultado por ACI Prensa sobre este tema, Mons. Márquez aseguró que “el Nazareno de San Pablo es el mismo Cristo, vivo y resucitado”.