El Rey de España, Felipe VI, ha cumplido con la tradición de la monarquía española de sumarse a la devoción popular al Cristo de Medinaceli, desde hace más de 300 años, el primer viernes de marzo.
Don Felipe ha acudido a la Basílica de Nuestro Padre Jesús de Medinaceli, uno de los siete templos que tienen esta consideración en Madrid, donde ha sido recibido por la comunidad de la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos que rige el lugar.
Es la tercera vez que el monarca acude a cumplimentar la imagen desde que accedió al trono. Las otras dos ocasiones sucedieron en 2018 y 2024. La tradición de que acuda un miembro de la Familia Real el primer viernes de marzo se remonta a 1682.
Un Cristo rescatado
El Cristo de Medinaceli, también conocido como Nuestro Padre Jesús de Medinaceli o Jesús Nazareno Rescatado, es una talla de autoría anónima, pero atribuida a la escuela del cordobés Juan de Mesa.
Tallada en el siglo XVII, fue llevada a la ciudad de San Felipe de la Mamora (actual Mehdía en Marruecos), para que recibiera culto de los soldados que tomaron esa plaza en 1614.