José Antonio y Juan Antonio Licona Vite son dos hermanos originarios del estado mexicano de Veracruz, quienes, además del lazo de hermandad, comparten una profunda vocación que los ha llamado a servir juntos a Cristo como sacerdotes.
Su historia es un testimonio de fe y amor, donde el llamado de Dios los ha unido en el ministerio sacerdotal.
Un llamado que despertó al contemplar la Eucaristía
Según contaron en entrevista con ACI Prensa, su camino hacia el sacerdocio comenzó a los 10 años, cuando comenzaron a servir como monaguillos en su iglesia local en el municipio de Álamo Temapache, gracias a la invitación de una de sus catequistas. Esta experiencia, relataron, fortaleció su compromiso con la fe y les permitió comenzar a sentir el llamado divino.
El P. José Antonio compartió que uno de los momentos más importantes de su vida, y de los primeros en los que sintió el llamado al sacerdocio, fue siendo monaguillo, “contemplando la Eucaristía”. Por su parte, el P. Juan Antonio relata que, al igual que su hermano, “el llamado al sacerdocio ocurrió debido a un momento culmen durante una Eucaristía donde miré la Hostia consagrada y sentí tanta alegría y emoción que nunca había experimentado en mi vida”.
