El Papa Francisco denunció el “acaparamiento” de las tierras de cultivo por parte de empresas multinacionales en su mensaje para la séptima reunión mundial del Foro de los Pueblos Indígenas en el FIDA.
Al dirigirse a los participantes de este encuentro, que se concluye el martes 11 de febrero, el Pontífice reivindica el valor de la contribución que los pueblos originarios hacen a la sociedad a través de “la salvaguardia de su existencia y de los recursos naturales que necesitan para vivir”.
“Algo que se ve gravemente amenazado por el incremento del acaparamiento de las tierras de cultivo por parte de empresas multinacionales, los grandes inversionistas y los Estados”, señala.
De este modo, el Pontífice deja claro que este tipo de prácticas “producen daños, amenazando el derecho a una vida digna de las comunidades”.
Por otro lado, insiste en la idea de que la tierra, el agua y los alimentos “no son meras mercancías, sino la base misma de la vida y del vínculo de estos pueblos con la naturaleza”.
“Defender, pues, estos derechos no es sólo una cuestión de justicia, sino la garantía de un futuro sostenible para todos”, afirma.