MADRID,
Reunidos en su IV Encuentro General, los 80 responsables de los Consejos Diocesanos de la Acción Católica de 30 diócesis de la Iglesia en España, renovaron su compromiso por promover integralmente el laicado y su presencia evangelizadora en una sociedad que quiere negar la dimensión trascendente de la persona humana.
El Encuentro fue realizado en Madrid los días 25 y 26 de Septiembre y contó con la presencia del Arzobispo de Valladolid y presidente de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar, Mons. Braulio Rodríguez; el Obispo de Ciudad Rodrigo y Consiliario de la Acción Católica Española, Mons. Atilano Rodríguez; y el Director del Secretariado de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar, don Antonio Cartagena.
En un comunicado final, los participantes del Encuentro afirmaron su decisión de seguir trabajando “esperanzadamente por la promoción integral del laicado y la presencia evangelizadora en la sociedad”.
“Somos laicos comprometidos en la vida de la Iglesia y en la totalidad de su misión; al servicio de la comunión eclesial, vivida en cada Iglesia particular. Cristianos laicos, que aman la vida y comparten con toda la humanidad, el compromiso de trabajar para que sea reconocida la dignidad de cada persona”, señala el comunicado.
Los delegados de la Acción Católica, señalaron estar “en una cultura materialista que quiere negar la dimensión trascendente, religiosa de las personas” y en la que “muchos derechos se ven amenazados”.
Por ello, tras reafirmar la conciencia de su vocación bautismal, los responsables diocesanos de la asociación manifestaron seguir “los desafíos señalados por SS Juan Pablo II en su reciente mensaje a la Acción Católica y queremos seguir siendo: “...escuela de formación de los fieles que, iluminados por la Doctrina Social de la Iglesia, se empeñan decididamente en la defensa del don sagrado de la vida, en la salvaguarda de la dignidad de la persona humana, en la realización de la libertad educativa, en la promoción del verdadero significado del matrimonio y la familia, en el ejercicio de la caridad hacia los más pobres, en la búsqueda de la paz y de la justicia y en la aplicación de los principios de subsidiariedad y de solidaridad en la diversa realidad social”.