El Papa Francisco exalta el legado cristiano en Irak y expresa su profundo aprecio por el país en el prefacio del libro La herencia cristiana en Irak, escrito por el periodista y teólogo Matthias Kopp, portavoz de la Conferencia Episcopal Alemana.
En el texto introductorio de la obra, adelantado este miércoles por Vatican News, el Papa Francisco recuerda “con gratitud” su Viaje Apostólico a Irak en marzo de 2021, una visita que emprendió “a pesar de la pandemia y de los problemas de seguridad” para expresar su “afecto y solidaridad” a todos los cristianos del país, quienes –afirma– “ocupan un lugar fijo y constante en mi corazón y en mis oraciones”.
A pesar de las dificultades que atraviesa, el Pontífice destaca su potencial y reafirma su mirada esperanzada hacia el futuro del país: “Este potencial reside ante todo en las personas que viven en el mismo Irak, todos aquellos que participan en la reconstrucción de la sociedad civil, que promueven la democracia en el país y que luchan por un diálogo sincero y realista entre las religiones”, añade.
El Santo Padre recuerda en particular su visita al Gran Ayatolá de Nayaf, Sayyid Ali Al-Sistani, líder musulmán chiíta, un encuentro que, según el Santo Padre, pretendió ser “una señal” para todo el mundo: “La violencia en nombre de la religión es un abuso de la religión”, asevera.
Con este gesto, el Pontífice consolidó el diálogo con la rama chiíta del islam, tal como lo había hecho en 2017 con su visita en Egipto al gran imán de Al-Azhar, máxima autoridad religiosa de los musulmanes sunítas. Años después, el 4 de febrero de 2019, el Papa y el imán de Al-Azhar firmaron el documento sobre la fraternidad humana.
Asimismo, en el marco de la visita del Papa Francisco a Irak, el primer mnistro de ese país, Mustafa Al-Kadhimi, anunció que el 6 de marzo se reconocería en adelante como el "Día Nacional por la Tolerancia y la Convivencia".