Sacerdote en Venezuela compara la realidad del país con la que se vivió en Alemania del Este

“Fue entrar en otra cultura, pero había cosas que llamaban poderosamente la atención”, afirmó desde el púlpito de su parroquia. Para llegar a su destino, precisó, debían cruzar “la famosa Alemania Democrática”.

“Digo 'famosa' porque ni era democrática, ni era Alemania”, expresó el P. Lofrano. El sacerdote narró la represión y la falta de libertades que se vivían allí en aquella época, gracias a las medidas y leyes promovidas por el régimen comunista.

“¿Por qué cuento esto? Porque es horrible venir hasta acá y encontrar la calle full [llena] de soldados, de encapuchados que tienen pasamontañas negros. Es horrible sentir que regresé a la Alemania Oriental”, afirmó el párroco.

Previo a la juramentación presidencial, el régimen chavista ha desatado una nueva ola de violencia y de terrorismo de Estado, desapareciendo a activistas, políticos y ciudadanos comunes por igual, entre los que se cuenta el yerno y padre de dos nietos de Edmundo González.

El P. Lofrano destacó la importancia del mensaje navideño, de la Encarnación del Señor que vino a vivir entre los hombres, un hecho histórico que debe servir para que los hombres eleven la mirada hacia lo trascendental, más allá de las coyunturas temporales y de los sufrimientos momentáneos.

El párroco remarcó que “esta no es la realidad que Dios quiere. Ni la zozobra, ni la angustia, ni el dolor, ni esa sensación trágica” de caminar por la vida con el miedo a las represalias por lo que se diga o se piense que no agrade al poder.

“No. La verdadera vida es la del Hijo de Dios, y Él no vino para salvarnos con palabras bonitas. Él vino y dio su vida. Nosotros somos seguidores de alguien que tuvo la esperanza en sus manos y podía haber evitado todo lo que sufrió. No, lo asumió. Por eso asumamos —como decimos en criollo— nuestro gallo muerto y tenemos que echar hacia adelante, porque solo de esa manera se hace la esperanza. ¡Hasta el final”, concluyó.