El Cardenal James Michael Harvey, Arcipreste de la Basílica Papal San Pablo Extramuros en Roma, abrió la quinta y última Puerta Santa del Jubileo de la Esperanza 2025.
Las Puertas Santas de este Año Jubilar, iniciado por el Papa Francisco el 24 de diciembre al abrir la primera en la Basílica de San Pedro, están también en la Basílica de Santa María la Mayor y en la de San Juan de Letrán. Y en esta ocasión, por un pedido especial del Santo Padre, en la cárcel romana de Rebibbia.
"Ábreme las puertas de la justicia, entraré y daré gracias al Señor”, fue la invocación final que pronunció el cardenal antes de ingresar por la Puerta Santa de la basílica donde reposan los restos de San Pablo, el llamado “Apóstol de los gentiles”, y en donde están los retratos de todos los Papas: desde San Pedro hasta Francisco.
Luego del rito de apertura de la Puerta Santa de San Pablo Extramuros, el Cardenal Harvey, los sacerdotes concelebrantes y fieles presentes, ingresaron a la Basílica para participar de la Santa Misa.
“Hemos cruzado el umbral del templo santo con inmensa alegría porque, de modo emblemático, hemos cruzado la puerta de la esperanza: la alegría y la esperanza es el binomio que delinea el rito litúrgico”, destacó al inicio de su homilía el purpurado estadounidense de 75 años, nacido en Wisconsin.