MADRID,
Después de que un diario español diera a conocer la existencia de una “hoja de ruta” por la que el Gobierno intentaría “reforzar la aconfesionalidad del Estado”, una serie de críticas se ha hecho sentir en España a pesar de que el Ejecutivo ha negado su existencia.
Según informa la agencia EFE, la Conferencia Episcopal Española ha declarado tener “indicios” de que se quiere implantar una “hoja de ruta” para reforzar la aconfesionalidad del Estado, reconociendo que "algunos de los puntos" de ese plan "parecen ser ciertos".
Efectivamente, el diario el Mundo informó que la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, está coordinando un "plan integral" a fin de que España alcance "un estatuto de aconfesionalidad del Estado, de conformar un verdadero estado laico, donde se acaben las innegables ventajas y privilegios de los que, según el ejecutivo socialista, goza la Iglesia católica".
El mismo medio señaló que una primera medida dentro de lo que denomina "una hoja de ruta contra los privilegios de la Iglesia", sería que el próximo año no se prorroguen automáticamente los acuerdos Iglesia-Estado, como venía siendo habitual, porque el Gobierno "quiere adecuarlos a una óptica constitucional".
Sin embargo, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró este viernes que actualmente no existe ningún plan de aconfesionalidad porque "no hace falta", al ser España, según su Constitución, un Estado laico.
Asimismo, tanto De la Vega como el vicepresidente económico, Pedro Solbes, dijeron que no habrá ningún cambio en cuanto a la financiación de la Iglesia Católica.