Los 21 pequeños que hacen parte del Coro de Niños Acólitos de Huancavelica, en la región andina del Perú, cantan el villancico “Huiñay Chuya” (Eterno candor) en esta Navidad, desde la ciudad imperial del Cusco, el llamado “ombligo del mundo”.
El video del alegre canto, interpretado en quechua y en español, se estrenó hace unos días y permite ver algunos importantes lugares del Cusco como la catedral, el Museo del Convento de Santo Domingo del Cusco – Qorikancha (Templo del Sol), y la fortaleza de Sacsayhuamán, este último el lugar donde todos los años en junio celebra la fiesta del sol o Inti Raymi.
En declaraciones a ACI Prensa, el P. Carlos Esteban López Bonifacio, promotor del coro, resaltó la importancia de la grabación en estos lugares como el Qorikancha; “que era el templo del dios inti, o sol, y ahora es un templo católico, y ahí recreamos el nacimiento de Jesucristo, el verdadero Sol”.
El sacerdote también destacó su agradecimiento a “Dios y a todos los que nos han apoyado porque verdaderamente ha sido un esfuerzo descomunal, ha requerido muchísimo esfuerzo por parte de los papás, de los niños y también el apoyo de personas porque ha costado mucho realizar este proyecto, el que más nos ha costado de todos”.
Tras agradecer la intercesión de Santa Cecilia, patrona de los músicos, el P. López destacó lo difícil que ha sido realizar este proyecto, sobre todo en la “parte económica”, ya que Huancavelica es uno de los lugares más pobres del Perú, pero comentó que finalmente “se ha cumplido: que lo disfruten y que lo compartan. ¡Feliz Navidad a todos!”.
El Coro de Niños Acólitos de Huancavelica, con más de una década de trayectoria y arraigado en la parroquia San Juan Evangelista, hizo un viaje de más de 15 horas por tierra desde ese lugar hasta el Cusco.